lunes, 22 de abril de 2013

sábado, 20 de abril de 2013

CONCIERTO PRÓXIMO SÁBADO



MÚSICAS PARA LA CÁMARA DE ISABEL DE CASTILLA
Danzas, romances, recercadas y villancicos glosados del Renacimiento español 


ANÓNIMO S. XV
Propiñán de Melyor, glosas instrumentales

JUAN DEL ENCINA (1468-h.1529)
Qu' es de ti desconsolado, glosas instrumentales sobre un romance
Si habrá en este baldrés, glosas instrumentales sobre un villancico
Una sañosa porfía, glosas instrumentales sobre un romance
Pedro y bien te quiero, glosas instrumentales sobre un villancico

FRANCISCO DE LA TORRE (h.1460-h.1504)
Dime triste coraçón, glosas instrumentales sobre un villancico

ANÓNIMO S. XV
Enemiga le soy madre, glosas instrumentales sobre un villancico

JUAN PONCE (h. 1460-1521)
Allá se me ponga el sol, glosas instrumentales sobre un villancico

ANÓNIMO S. XV
Tres morillas m'enamoran en Jaén, glosas instrumentales sobre un villancico
Pase el agoa, glosas instrumentales sobre un villancico

ANÓNIMO SEFARDÍ
Triste estaba el Rey David, glosas sobre un romance

DIEGO ORTIZ (h. 1510-h.1570)
Tres recercadas

CINCO SIGLOS
Antonio Torralba, flautas
Gabriel Arellano, vihuela de arco
Miguel Hidalgo, vihuela de mano y dirección
José Ignacio Fernández, bandurria renacentista
Daniel Conde, rabel bajo
Antonio Sáez, percusión

jueves, 18 de abril de 2013

EL ENCANTO DE ARA MALIKIAN


[04 de abril de 2013. Octavo Concierto Temporada de Abono. José Luis Turina, Homenaje a Oscar Wilde. Concierto para violín y orquesta. Enrique Fernández Arbós, Bolero. Tres piezas de concierto para violín y orquesta. Ara Malikian, violín. Orquesta de Córdoba. José Luis Temes, dirección. Gran Teatro de Córdoba. 20:30 horas.]

Interesantísimo concierto el ofrecido por nuestra orquesta como octavo de su actual temporada de abono. Los alicientes se centraban en la novedad del repertorio y, evidentemente, en la personalidad musical del solista invitado: el violinista libanés Ara Malikian. Éste no defraudó en absoluto en sus tres intervenciones; cuatro, si contamos la simpática explicación antes de la propina, presentación llena de modestia, humor y naturalidad. La primera intervención de Malikian fue en el concierto de José Luis Turina, quien se encontraba, por cierto, en la sala y también compartió con el elenco de intérpretes los prolongados aplausos al final de la pieza. El solista, que grabó la obra con la Orquesta de Córdoba y Temes en 2009, mostró un dominio absoluto de las dificultades y supo sacar partido expresivo a todos los ambientes emocionales a los que esta obra virtuosa enfrenta al violín. En las piezas de concierto de Arbós brilló aún más, aunque la orquesta no lograra estar a su altura en cuanto a fuerza y precisión rítmicas. Como en la brillante propina (una ecléctica composición propia de carácter improvisatorio), Malikian hizo gala de un sonido bellísimo, una técnica llena de naturalidad y una fuerza expresiva cautivadora.
            El otro aliciente de la velada se centraba, como decía, en la novedad del programa: dos obras (el concierto de Turina y el Bolero de Arbós) entraban por primera  vez en el repertorio de la Orquesta de Córdoba; y la versión orquestal del Homenaje a Oscar Wilde de Turina era estreno absoluto. De estas obras, la de mayor enjundia es el ya mencionado Concierto para violín, obra de muy sólida factura, llena de originalidad y hallazgos expresivos, que fue muy bien realizada por todos los intérpretes, destacando especialmente la sección de percusión, siempre un valor seguro de nuestra orquesta. Ésta, como ya he apuntado, estuvo algo más desafortunada en la segunda parte. Las piezas de Fernández Arbós programadas basan en gran medida su encanto en el garbo rítmico y este aspecto no fue del todo bien resuelto a mi juicio por la formación cordobesa y su director para la ocasión.
            Mención aparte merece la encantadora obra que abrió la velada, el Homenaje a Oscar Wilde, una obra sencilla de pretensiones, pero muy bien compuesta en sus cuatro movimientos interrelacionados. Escrita originalmente para cuarteto de cuerda en 1997, fue adaptada por su autor para orquesta de cuerda en 2004 y para orquesta sinfónica en 2013. Esa versión recién acabada fue la que hizo sonar espléndidamente la Orquesta de Córdoba el jueves pasado.
 

Antonio Torralba



[Publicado en El Día de Córdoba el 6 de abril de 2013]