sábado, 16 de marzo de 2013

Y AHORA ¡LOS MAESTROS!

Nada más peligroso que un tonto que se cree listo. Es la estela de Esperanza Aguirre. Se trata de decir algo aparentemente incuestionable, pero poco estudiado. Y decirlo tajantemente, para que la peña más o menos afín, más o menos cabreada, más o menos hambrienta de populismo, cansada de "corrección política" diga: "por la cara", "ha hablado bien", "ha llamado a las cosas por su nombre". Se crea el estilo Pérez Reverte. Si matizas, aburres. Si explicas, el mensaje se diluye, no llega. Hay una empresa que lanza mierda sobre sus trabajadores sin plantearse que lo normal en esos casos es renovar el consejo de administración. Me refiero a la Comunidad de Madrid. ¿A qué mente calenturienta se le ha ocurrido hurgar en la basura? ¿Cuántos medios humanos se han dedicado a investigar los exámenes no aprobados en oposiciones a maestros para echar otra paletada de descrédito sobre quien sea? Ahora toca amplificarlo en los medios hasta la náusea. La culpa de que los niños no sepan es que los maestros no saben. ¿Quiénes, los que aprobaron la oposición? No, no: los que la suspendieron.

2 comentarios:

Lola MU dijo...

¡Es todo tan repugnante, Antonio!
Abrazos desde un nauseabundo Madrid.

Anónimo dijo...

Bravo, excelente comentario sobre una de las lacras de nuestro país.