lunes, 25 de febrero de 2008

Gastronomía para salir del paso

Hay días que uno no tiene el coño para ruidos, ni ganas de complicarse para uno solo. Y se apaña con una parrillada de vieiras, rape y carabinero, con humus, emulsión de coral y cristal de patata morada; y poco más. Si acaso, para rematar, unos envoltinis de atún relleno de gambas, crema fina de coliflor y granizado de Bloody Mary... O echa mano de las sobras, que no se nos caen por ello los anillos. Se alegra de haberse empeñado en guardar dos raciones de arroz meloso con setas de temporada y conejo de tiro... Aunque también es verdad que tardas más en sacarlo del frigo y semitemplarlo que en laminar un taco de buey y acompañarlo de un poco de foi a la brasa con souflé de torta de casar. Y qué decir del socorrido pero apañao pato azulón asado en dos cocciones con algo de intxaursalsa. ¿Soso? ¡Pues añadámosle el plátano caramelizado de toda la vida! Y si no tienes nitrógeno líquido, pídeselo a cualquier vecino y así te relacionas de paso. Imaginación, que con poco dinero e imaginación se puede hacer mucho. Y dejemos el "frío huevos y patatas" para las ocasiones.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Nada como la sencillez ;) Los huevos fitos y el Nefast Food para las celebraciones: así se habla.
Besos...

Antonio Torralba dijo...

Sí. ¡Comer y reír!

Anónimo dijo...

Que imaginación has tenido en un momento, yo no sabía, que entendías
tanto del buen comer y beber, querido Antonio. (que más quisieras
Mª Luisa