domingo, 23 de agosto de 2009

Cuando me rindió mi dama

Cuando me rindió mi dama, tan gentil y bella, en su llama me quemé como una polilla. Rojo cual vermellón al resplandor de una chispa cuando me rindió mi dama. Si hubiera sido esmerejón o hubiera tenido vigorosas alas me habría guardado de la que me clavó su agijon cuando me rindió mi dama.


Quand je fus pris au pavillon
De ma dame, très gente et belle,
Je me brûlai à la chandelle
Ainsi que fait le papillon.

Je rougis comme vermillon,
A la clarté d'une étincelle,
Quand je fus pris au pavillon.

Si j'eusse été esmerillon
Ou que j'eusse eu aussi bonne aile,
Je me fusse gardé de celle
Qui me bailla de l'aiguillon
Quand je fus pris au pavillon.


Texto: Charles d'Orléans (1393-1465)
Música: Reynaldo Hahn (1874-1947)
Canta: Jaroussky
Toca el piano: Ducros
Lugar: Verbier, Suiza



Fecha: 27 de julio de 2009

1 comentario:

Anónimo dijo...

JAROUSSKY, me resulta sublime para la música.
En el siglo XVIII "Los Castratis".
Mataban y mutilaban por la música.
Antonio, pregunto:
¿Hoy por hoy existen castratis?